La química nos rodea, y por eso os traemos 11 datos un poco aleatorios sobre compuestos químicos que encontramos en nosotros mismos, en la cocina, o en general por nuestra hogar.
- Los jugos gástricos del estómago, que contienen entre ellos ácido clorhídrico (HCl), tienen un pH que oscila entre 1,6-1,8. Son más ácidos que el ácido cítrico del limón, que tiene un pH de 2,1. Las mucinas de la pared estomacal y el bicarbonato sódico nos protegen de este pH tan extremo.
- La fruta al madurar produce el gas etileno (CH2=CH2, un alqueno), que es una importante hormona vegetal en forma de gas que estimula la maduración. Las naranjas, los higos, los kiwis, los plátanos y los aguacates, entre otros, son sensibles al etileno y se deterioran pronto en contacto con él.
- La fructosa, un monosacárido cetónico que se encuentra en las frutas, es más dulce que la sacarosa, un disacárido compuesto por fructosa y glucosa que se conoce también como azúcar de caña.
- La mioglobina es una hemoproteína, similar estructuralmente a la hemoglobina, responsable del color de la carne roja. Se encuentra en el tejido muscular y tiene función de unirse al oxígeno diatómico, O2. Si la carne ha sido tratada previamente con nitritos, conservará su color rosa aunque se cocine. Éste es el caso del jamón de york, y es debido a que el átomo de hierro del grupo hemo se une de forma covalente al óxido nítrico (NO).
- El ácido butírico (CH3CH2CH2-COOH), cuyo nombre proviene de la palabra griega para designar a la mantequilla, es responsable del olor de la mantequilla rancia. Se produce por fermentación anaeróbica de la leche y sus derivados, y también es responsable del mal olor del vómito humano.
- El timol (thymol, un fenol monoterpeno) se emplea en la conservación de libros y documentos para combatir las esporas de hongos, aunque está en desuso porque parece que acelera la degradación del papel. Además, es uno de los ingredientes inactivos de cierta crema mentolada para los síntomas del resfriado. Está presente en la naturaleza en el tomillo (Thymus vulgaris) y el orégano (Origanum vulgare), muy usados como condimentos.
- La miristicina es un fenilpropeno con actividad psicoactiva que se encuentra presente en el aceite esencial de nuez moscada (y en menor concentración, en el perejil y el eneldo) que puede causar alucinaciones por su efecto anticolinérgico. Es un precursor natural de la MMDA, una droga anfetamínica.
- El geraniol es un alcohol monoterpenoide volátil presente en flores como rosas y, paradójicamente, en menor cantidad en geranios, y en sus aceites esenciales. Atrae a las abejas, que pueden producirlo con glándulas específicas y lo usan para marcar la entrada a sus colmenas y localizar flores con néctar.
- Una forma de fabricación de lápiz de labios comercial es elaborarlo con cera de abeja y aceite vegetal. El aceite suele ser de ricino (castor oil), que se extrae del Ricinus communis o higuerilla.
- El tungsteno o wolframio, un metal de transición, se usa como filamento en las bombillas. Su nombre deriva del sueco tung sten, "piedra pesada".
- Los tubos de neón, empezaron a usarse en EEUU, y contienen el gas noble homónimo en su interior. El elemento recibió ese nombre, que deriva de la palabra griega que significa "nuevo".
"No sé tú, señorita Kitty, pero yo me siento totalmente... Deliciosa" |
Adaptado del artículo de E. Sanz Diez curiosidades químicas cotidianas que deberías conocer para Muy Interesante